Costa Esmeralda
Detrás de largas jornadas de trabajo y con un ritmo de vida cada vez más frenético, se esconden las ansiadas vacaciones, ese momento en que todo se convierte en diversión y uno se deja querer por lugares paradisíacos, en los que el sol, la arena blanca y las aguas cristalinas son el principal protagonista.
Si eres de los que está pensando en hacer un viaje de estas características, ya sea solo, en pareja o con familia, una de las opciones a barajar puede ser Cerdeña, concretamente Costa Esmeralda, un rincón con particular encanto en la zona norte de la costa, que, estamos seguros, no te defraudará.
¿Cómo llegar a tu destino?
Todas aquellas personas interesadas en visitar Cerdeña deben saber que existen cuatro aeropuertos en la isla, con lo que la comunicación se hace relativamente sencilla. Al noroeste se encuentra el Aeropuerto de Fertilia en Alghero, sin embargo, mucho más práctico es aterrizar directamente en la pequeña terminal del Aeropuerto de Olbia, pues apenas hay doce kilómetros a la ciudad.
Olbia
Con una situación geográfica inmejorable, ya que se encuentra en el centro de Costa Esmeralda, Olbia resulta un punto de partida estupendo para comenzar a explorar la ciudad. Entre restos cartagineses, ruinas arqueológicas como el acueducto romano de Abbas Cabu, o bellos edificios como su Ayuntamiento, la Catedral o Biblioteca el visitante disfrutará como un niño. Además de Olbia, otros rincones de Costa Esmeralda que merecen especial mención son Porto Cervo, Arzachena, Capriccioli y Romazzino entre otras.
Pero si lo que de verdad pretende con sus vacaciones es disfrutar de las playas de Cerdeña, te recomendamos las mejor valoradas de la Costa Esmeralda:
En Arzachena se encuentra Spiaggia del Principe. La caminata de aproximadamente un cuarto de hora hasta la misma desde el aparcamiento merece la pena, pues, aunque es una playa con gran afluencia de gente en verano, sus bellas aguas cristalinas la convierten en un lugar ideal para los amantes del submarinismo y el snorkel. Por otra banda, aunque de difícil acceso tenemos la Spiaggie Rosa (Budelli). Dado que se trata de una reserva natural, su acceso solo puede darse en barco o en una de las maravillosas excursiones que se ofertan en la isla. La vegetación y las dunas de la Playa del Pevero son otra de las alternativas que no dejan indiferente al viajero.
Porto Cervo situada en el nordeste de Cerdeña es la capital y el verdadero corazón de la Costa Esmeralda. Construido alrededor de un puerto natural, Porto Cervo preside una bahía rodeada de vegetación uno de los puertos mejores equipados del Mediterráneo. Además, caminando por sus muelles podrás admirar los barcos y yates más espectaculares.
Los amantes de la arqueología tienen un añadido en Costa Esmeralda, pues podrán disfrutar, entre otras muchas cosas, de los distintos monumentos funerarios que datan de la Edad de Bronce y que constituyen una visita obligada si uno se quiere empapar de la historia de Cerdeña. Una de las más conocidas es la Tomba dei Giganti di Li Muri.
Al respecto de estas gigantescas construcciones funerarias y como curiosidad, destacar las estrecha relación que las mismas parecen guardar con la astronomía, pues su orientación se relaciona con el sol e incluso la estrella Aldebarán, la decimotercera más brillante del cielo nocturno y la primera en la constelación de Tauro. Es precisamente la noche, la que hace que la isla se vista de gala y haga de anfitriona en este maravilloso rincón del mundo, en donde el viajero puede relajarse a ritmo de una buena copa y un agradable ambiente musical en las distintas discotecas y clubs de playa.